¿Por qué el cambio climático derrite la nieve más despacio?
08 MARZO 2017 | Imagen: Jantrettenero.- El cambio climático no siempre es sinónimo de frío o de calor extremos. El factor de cambio no puede dejarse de lado como uno de los aspectos definitorios de las consecuencias de este fenómeno. Entre otras mutaciones, se observa que el calentamiento global promedio no solo se traduce en un deshielo acelerado, sino en todo lo contrario.
Aunque en tiempo geológico el deshielo se produce de forma mucho más temprana ahora, si lo contemplamos desde un enfoque estacional la respuesta al cambio climático es muy diferente, según un estudio de la revista Nature Climate Change sobre el comportamiento de este con respecto a la nieve de montaña.
Disminución de la luz solar directa
Financiado por la National Science Foundation, entidad patrocinadora del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR), el estudio concluye que el cambio climático ha modificado el patón del deshielo estacional de las montañas. A consecuencia de ello, se esperan cambios en los patrones hidrológicos, y a su vez variaciones en el abastecimiento de agua, con una disminución de caudal y cambios en el equilibrio del ecosistema.
La pregunta es inevitable? ¿El mundo no está calentándose, entonces por qué ocurre esto? El calentamiento global acelera el deshielo de los polos y aumenta las temperaturas medias del planeta, esta noción básica del cambio climático sigue siendo válida.
Sin embargo, el deshielo comienza antes por lo que cambia la manera de producirse este, ya que el sol está a distinta altura y no incide igual, del mismo modo que el calentamiento global en muchos enclaves tiene como consecuencia la producción de menos hielo.
«Cuando el deshielo se desplaza a principios de año, la nieve ya no está derritiendo bajo los altos ángulos de sol de finales de la primavera y principios del verano», dice Keith Musselman, autor principal del artículo. Por lo tanto, el sol «no proporciona suficiente energía en esa época del año para impulsar las altas tasas de deshielo» que se consideraban habituales.